Las que tenemos la piel muy sensible sabemos muy bien que no cualquier cuidado o producto nos vale. De la misma manera que debemos proteger nuestra piel con protector solar a diario o con cremas para minimizar los efectos del frío, sabemos que debemos utilizar productos específicos para maquillarnos y desmaquillarnos y evitar así picores, rojeces o manchas. Hoy vamos a ver algunos consejos para elegir bien con que cuidarnos.
Lo primero de todo es leer bien las etiquetas cuando vayas a comprar tus productos. Elige productos neutros, sin aromas, ni componentes agresivos, sobre todo los que encontrarás en farmacias o establecimientos especializados y de confianza. Si tienes dudas pregunta en el propio establecimiento, ellos podrán aconsejarte según tus necesidades.
Empieza por aplicar un agua mincelar o crema desmaquillante con suaves toquecitos. Retírala con agua (no cometas el error de usar agua muy caliente que puede provocar más rojeces, usa agua templada) o con un disco de algodón con movimientos circulares suaves.
Si utilizas cosméticos resistentes al agua, también deberás usar un desmaquillante especial para ojos y labios, pero ya sabes que está zona es sensible así que desmaquilla con suaves movimientos sin apretar las pestañas y el contorno de ojos.
Utiliza tu leche limpiadora, una vez que te hayas quitado todo el maquillaje. Es muy efectiva, así que aplícala en todo el rostro, especialmente en frente, nariz y barbilla.
Y para terminar no olvides aplicar tu crema hidratante o nutritiva.