Uno de los placeres de esta vida es dejarse mimar y nada como un día en un spa para relajarse, cuidarse y desconectar. Pero sí además se hace en compañía de tus mejores amigas puede ser una jornada de 10.
Habitualmente pensamos en spa y pensamos en la ciudad, un lujoso hotel… pero ahora no siempre es así porque muchas casas rurales u hoteles rurales han adaptado sus instalaciones para ofrecer todos los cuidados necesarios rodeados de naturaleza. ¿Estás planificando una escapada de amigas y tienes dudas? Vamos a analizar los pros y contras del Spa urbano y del Spa rural.
Una de las cosas a favor del Spa Urbano es su cercanía, la facilidad para ir andando, en bici o en transporte público… no necesitaréis ni coche, ni mucho tiempo para ir. Cosa que puede ser ideal si lo que pensáis es ir solo una mañana o tarde para un circuito de aguas y un tratamiento entre amigas. Los Spas urbanos suelen estar enfocados más a tratamientos de belleza, peeling, cavitación, etc. Además muchos cuentan con un servicio integral que incluye manicura, pedicura y hasta peluquería para salir completamente lista.
Por el contrario ir a un Spa rural te puede llevar unos kilómetros en coche, pero el encanto del paraje donde se encuentre puede ser ese plus que necesitabais para relajaros de verdad, y si además habéis pensado pasar un fin de semana lo más seguro es que aquí encontréis el alojamiento que necesitáis. Los Spa rurales suelen tener enfocados sus tratamientos más a relajación o a temas médicos con unas aguas termales especiales de manantial. Contracturas, ciática, circulación, etc. Llegando a incluir en muchos Spa de zonas de playa el tratamiento con lodos, ideales para problemas de piel o reumáticos.
Si decides hacerlo en casa, date un capricho con materiales de calidad: algodón, aloe vera y productos naturales.